28 de abril de 2016

Vuelo

Quiero caminar bajo la lluvia sin preocuparme por el frío, llorar sin temor a ser juzgada, correr hasta sentir que tengo alas. Quiero sonreír llena de vida, plena de todo. Quiero respirar el tiempo, detener el aire, flotar por tan sólo un momento.


Amo estar despierta, poder vivir mis sueños; me apasiona todo, hasta lo que no tengo. Quiero y quiero tanto que me pierdo. Me pierdo en instantes fascinantes… 
me encuentro.

20 de abril de 2016

Dame tus años

Dame tu mano, que quiero caminar sin rumbo en este camino empedrado. Dame tu mano, que quiero volar a tu lado, dame tu mano. 

Dame tu mano y cierra los ojos, que te voy a besar los párpados y el pelo enredado por el viento que es tan afortunado como yo por haberte tocado, dame tu mano. 

Quédate para siempre y dame tu mano. Muérete conmigo y dame tu mano, que tengo miedo de ver que al final no te has quedado, dame tu mano. 

No me mires, que de tanto caminar ya me he cansado y no me veo bonita porque estoy llorando, pero dame tu mano. 

Dame tu mano y tu existencia, y tus ganas y tus labios, no merezco nada, pero dame tu mano; que a cambio de tu mano yo prometo intentar no hacerte daño.

16 de abril de 2016

Brillar y brillar.

He visto el mundo y no sabes cómo desearía acabar con él. Se cubren de diamantes para poder brillar; y luego estoy yo que deseo noches, muchas noches frías de invierno. Deseo que tú y yo seamos salvajes para siempre. Deseo que sigamos jugando como niños.

Me pregunto si seguirás amándome cuando deje de ser joven y hermosa. ¿Seguirás amándome cuando no tenga nada más que mi alma? 
  
También deseo días calurosos de verano, deseo Rock 'N Roll, deseo que toques para mí, deseo todos los caminos que conocimos, deseo conocer caminos nuevos... Deseo que mi alma sea eléctrica.


No quiero diamantes, solamente quiero brillar.

10 de abril de 2016

Me gusta verte cuando duermes

Me gusta verte cuando duermes, preguntarme con qué sueñas, ver tus ojos cerrados, imaginarlos abiertos, tocar tu cara y que ni te enteres. Me gusta cuando duermes. 

Me gusta lo que eres. Me gusta que me tienes. Me gusta saber que cuando despiertes vas a ser mío, como siempre. Me gusta que duermas en mi cama, me gusta que despiertes a mi lado, amo que me hayas amado, y que sigas aquí. 


Me gusta verte cuando duermes.

6 de abril de 2016

Llegaste, me llenaste

Hay pequeños rinconcitos en la vida que no notamos de tan chiquitos, cajones en los que no ponemos recuerdos, repisas sin historias, portarretratos sin nombre, floreros sin momentos románticos que terminen en historias para contar a nuestros nietos.

Hay pequeños rinconcitos en la vida que dejamos desocupados sin querer, que permanecen vacíos hasta que llega alguien y los llena sin que nos podamos defender. Y los colman de sonrisas y de brazos, de besos, días, noches, miradas, almohadas, palabras, secretos, besos, más besos… y también brazos y abrazos.

Hay pequeños rinconcitos que simplemente esperan ser llenados porque tarde o temprano se han de volver el espacio más importante de nuestras vidas.


No puedo imaginar a nadie mejor para llenar todos esos pequeños recovecos que yo no había notado, que tú.