Pasan los meses, y sé que no regresarás.. Dejaste tanta gente que te quería, tantas personas que te necesitamos. Gracias por haber estado conmigo esos últimos 16 años, por haberme dado todo tu amor y por todos tus consejos, por toda tu ayuda, por todo lo que siempre hiciste. Por todo lo que sigues haciendo, aunque estés lejos.
Donde quiera que estés, quiero que sepas que te quiero. Eres la mejor tía que cualquier persona pueda querer tener, no tienes comparación.
Siempre extrañaré tus risas, como mojabas las galletas maría en el vino, y esa aura tuya en la que no importaba qué pasara siempre llenabas todo de alegría. Llegabas a la casa directito a agarrar el teléfono y llamar a mis primos mientras mi mamá sacaba la botella de vino nueva porque no te gustan cuando están abiertas. Y al final te teníamos que decir que te fueras, que queríamos dormir.. Ya era la propia rutina perfecta.. Ahora se siente el vacío en la tardes, y no puedo imaginar lo que sentirá mi mamá.
Te extraño, y sé que te prometí no llorar, pero a veces no puedo evitarlo. No soy tan fuerte como tú; tú eras de otra dimensión.
Es cierto que a veces las mejores personas son las primeras en dejarnos, pero mientras haya quien sonría al recordarte tú permanecerás en la Tierra con nosotros. Para mí siempre estarás conmigo.
Sé que los angelitos no pueden leer esto, pero igual te escribo, sé que da algún modo sabes que siempre te llevo conmigo, en mi corazón y mis recuerdos..
Te quiero.