30 de septiembre de 2015

Te sé de memoria.

Lo que sé de ti no es mucho, tal vez no sepa nada en realidad. 

Pero sé que tú me das las sonrisas más bonitas, me llenas el mundo de color e incluso cuando llueve me dibujas un arcoíris. Sé que me arreglas el corazón, le regalas canciones de amor y a mi alma le das flores. Lo que sé de ti es que me haces querer quedarme para siempre en un lugar y dejar de huir, me ahuyentas los miedos, estoy segura que debajo de mi cama ya no hay monstruos. 

Me sé de memoria tus manías, y tus sueños, nunca me contaste tus miedos pero me di cuenta que el único que me dejabas ver era que tenías miedo a perderme. También sé que las estrellas son más bonitas en tu espalda, tu risa es el paraíso y tus abrazos reparan almas, que prefiero tus besos a los dulces y que la vida peleando contigo es más perfecta que no pelear con nadie. 

Lo que sé de ti es que te amo, y jamás lograré amar a alguien de esta manera, tanto y tan fuerte, porque a ti ya te sé de memoria.

26 de septiembre de 2015

Si lo hubiese sabido...

Hoy resulta que abro los ojos cada mañana y no han llorado, mis manos están limpias de caricias extrañadas, mi ventana no es pretexto para huir entre suspiros a tu boca, y en mis días ya no faltas. 

No tengo absolutamente nada de lo que quise, no te tengo a ti ni a tus ojos, ni tu cuerpo en mi cama, ni vivo en tu casa, ni dependo de tus ganas. No tengo nada de lo que quería tener cuando creía que te querría para el resto de mi vida. 

Tengo un montón de cosas que jamás soñé, tengo una sonrisa enorme que se forma en su cara cada vez que me ve, tengo sus brazos que se han vuelto mi almohada favorita al punto de contracturarle el hombro, tengo sus ganas, su sueño en mi cama, y una ventana que miramos juntos cada mañana. También tengo un gato, y no me falta nada. 

Tengo una voz horrible con la que canto cuando él baila, tengo el pelo despeinado de alegrarme con tantas ganas, tengo un montón de vestidos para presumir mis piernas flacas, las mismas con las que camino a donde me dé la gana. 

Tengo un montón de cosas desde que no te tengo a ti.

24 de septiembre de 2015

Se me da peor mentir que escribir.

Un "o lo escribo o se pudre dentro" en mi cabeza constante. Y siempre acabo vomitando cosas sin sentido, en verso sin métrica ni rima, porque poesía eres tú y no los versos de Neruda. 

Si pudieras leer mi mente con la misma claridad que ves el miedo en mis ojos, mandarías a tomar por culo todos esos libros de García Lorca.

Mira en lo que me he convertido. Soy una puta suicida que dispara te quieros y se pone en medio para que no duelan tanto. Sigo sin superar mi miedo a la vida; sin tener el valor suficiente para ponerle color a todos mis dibujos, y lo que es peor... sigo sin firmarlos con mi nombre porque los siento más tuyos que míos.

Eres mi puta inspiración: Si decides volver ten presente que a base de arte podríamos hacer de este mundo un lugar más bonito dónde querer quedarnos a morir juntos

4 de septiembre de 2015

Devuélveme la vida.

Y de pronto es demasiado tarde para asomarte por la ventana hasta tocar el suelo desde un quinto piso mientras lo miras a los ojos borracha y prometes que lo vas a amar para siempre. Así sin avisar ya no es de noche y las estrellas ya no están. Así como si nada ya no puedes volar, ya no puedes gritar… y ni tienes ganas. Todo tiempo pasado fue mejor y tú ni lo sabías. Así como si todo fuera en vano las sonrisas son recuerdos, las manos están gastadas, las ganas agotadas y los ojos secos. Así, sin más, ya no hay nada. 
Quiero caminar por un túnel de regreso a los días en los que no sabía todo lo que el sol valía, quiero regresar a los pasos que llevaban a la nada, a la lluvia en mi pelo, a todas las mañanas que no terminaban y a los errores que acababan en alguna cama. Quiero regresar a la llamarada de conflictos que te hacen reír mientras te arrancas la cara en llanto de tanto. Detenerme en medio del torbellino y saber que estoy ahí, sintiendo todo lo que nunca más he de vivir.