El día de hoy, a las 3 de la tarde, por ejercer su derecho a la protesta, se llevaron "detenidos" a unos 30 estudiantes, entre los que había 19 jóvenes de la Universidad Simón Bolívar, esa de la que siempre dicen que estudian puros nerds que solo saben de números. Varios de ellos mis amigos, muchas caras conocidas.
La Guardia Nacional Bolivariana los subió a un camión de cava sin identificar, los robó, les echaron gas lacrimógeno (o "gas del bueno", como le dicen los del Gobierno) y los encerraron a dentro. En ese camión se los llevaron.
Se los llevaron secuestrados.
Por horas, lo único que se sabía sobre su paradero eran rumores. Es por fin, en la noche, cuando se sabe que están en el Helicoide (para los que no saben qué es les dejo este link y este), en el SEBIN.
Pero la verdad, es que la Dictadura de Nicolás los secuestró por pensar diferente. Por exigir sus derechos.
Entre las fotos de caras asustadas hay amigos, hay chamos que se han sentado en un salón conmigo a ver una clase. Santiago de Viana y Oriana Barrientos son mis amigos, son compañeros, son delegados de USBLAMUN. A Santiago lo conozco del colegio, he compartido domingo tras domingo con él para prepararnos y representar al país en el Modelo de Naciones Unidas de la Universidad de Los Andes en Colombia. Si nos ponemos a echar los cuentos de cada uno, no terminamos nunca.
Somos estudiantes pero en Venezuela nos tratan como criminales.
Basta ya de tanta injusticia, basta de escasez, de hambre, de abusos. Empiecen a detener a los delincuentes que asesinan impunemente, y déjennos estudiar pues nosotros somos el futuro de este país, los que lo vamos a tener que reconstruir cuando se acabe esta Dictadura.
Hoy escuché por teléfono a una mamá llorar, que no es la mía, pero podría, porque se llevaron detenido a su hijo y no sabe cuándo volverá a verlo o qué tendrá que vivir en un país donde no hay garantías. Escuché del otro lado del teléfono el silencio de una mamá perdida que no sabía cómo reaccionar.
Nicolás Maduro, tú eres el responsable de la vida de estos chamos, tú eres el responsable de que regresen está noche a sus casas a dormir con su familia. Tú (y tu combo de narcogobernantes) eres el responsable de todo lo que estamos viviendo.
Ya basta.